Las bodegas gallegas apuestan por la internacionalización

Cepas y Vinos nº6 .inddEditorial Junio 2014

 

En la entrega de los Premios Galicia 2014 a los mejores vinos gallegos, el presidente de la Xunta destacó el aumento de más de un 22% en las ayudas públicas a la puesta en valor de nuestros vinos en países terceros (los que no pertenecen a la Unión Europea), que consiguieron los 3,7 millones de euros en 2014, así como los 2,6 millones de euros destinados a la promoción de productos de calidad en los mercados gallego, español y europeo, con un incremento del 25,9% respecto al año anterior.

Este incremento en el monto de las ayudas no es gratuito, responde a la demanda y a las necesidades de un sector que en los últimos años ha visto como crecía la importancia de la exportación en su negocio. En algunos casos, incluso, muchas empresas han tenido en las ventas al exterior una gran ayuda para sortear la crisis económica. A la apertura de mercados que inició la Denominación de Origen Rías Baixas empujada por el éxito del albariño en buena parte del mundo, le siguieron rápidamente el resto de las D.O. gallegas. La buena aceptación de nuestros vinos en las ferias celebradas en todo el mundo también animó a muchos bodegueros a iniciar en solitario la aventura empresarial fuera de nuestras fronteras,

No hay más que echar un vistazo a las actividades promocionales de las cinco denominaciones de origen gallegas para confirmar la intensa promoción que se está haciendo de los caldos ‘Made in Galicia’ en el exterior. Catas en Manchester, Londres o Tokio, numerosas visitas de periodistas extranjeros y acciones puntuales en el extranjero forman parte habitual de las agendas de muchos de los empresarios del vino. Se trata de una estrategia clara por parte del sector vitícola gallego de abrirse a nuevos mercados, a los que está conquistando a base de calidad, personalidad y mucho esfuerzo y trabajo de campo.

Asimismo, los vinos gallegos parecen resistir la crisis mejor que otros sectores a tenor de las últimas cifras manejadas por el Gobierno gallego. Entre los principales datos, el año pasado destacó el incremento en casi un 30 % de las exportaciones de vino en la comunidad gallega en los últimos 5 años, y todo esto en plena crisis económica.

Cifras a tener muy en cuenta ya que este sector “estratégico” genera más de un millar de puestos de trabajo directos y produce un total de 44.000 toneladas de uva al año, con un valor económico que supera los 150 millones de euros.

En este sentido, se han dispuestos diversos instrumentos financieros por parte de la Administración para apoyar a las empresas en su apuesta por la internacionalización. De hecho, en el primer trimestre de 2014 las exportaciones gallegas crecieron un 7% después de un 2013 marcado por un récord histórico, con unas exportaciones de 18.149 millones de euros y un incremento próximo al 12% sobre el año anterior.

Otro de los atractivos del mundo del vino de Galicia que está despertando gran interés en el exterior es el llamado “enoturismo”. Este tipo de iniciativas, que también actúan como dinamizadores del rural gallego, están teniendo un papel fundamental en muchas bodegas. En este sentido, los vinos gallegos trazan un camino imprescindible a lo largo de la geografía gallega, que es posible recorrer gracias a la Ruta de los Vinos de Galicia, cuyas jornadas de puertas abiertas cumplen este año su tercera edición.

También juegan a favor de los vinos de Galicia las diferentes campañas de promoción que se están llevando a cabo a través de diferentes vías. En esta línea se enmarcan iniciativas como el Túnel del Vino, por el que pasaron este año cientos de personas, que tuvieron la oportunidad de catar hasta un total de 200 vinos diferentes, entre ellos los distinguidos como Mejores Vinos de Galicia.

El camino no es fácil, la competencia es dura y la crisis todavía está presente, pero todo parece indicar que las denominaciones de origen gallegas están en la buena senda.